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parecer


Por eso me quedé acá,
en short y en patas.

Ni el diez por ciento de mi ropa
está a la moda. Lo sé.
A veces me preocupa,
quisiera ser igual,
venderme como copada;
sonreír.
o poner cara de orto
para satisfacer a quien camina al lado.
Ya es tarde.

Quedé en la idea que es mejor
caminar cómoda,
El silencio es buen amigo
o es cómplice.
Eso de
no meterme en problemas,
no meterme en quilombos que no valgan.
Porque cuando hay que poner el cuerpo,
a nadie le importa el careteo.
Hay que dejar la piel, y sin quejas de dolor.
Al menos, eso entiendo por militancia.

Mi bandera tiene la cara de los pequeños
felices momentos:
El mar, el tío,
el rio, nadar,
papá, mamá,
la guitarra, un amigo,
el patio, mis hermanas,
el mate, otro amigo,
la bici, mi ciudad,
el pan casero, la abuela
la ruta, más amigos.
Correr, sentir, amar.


Sigo descalza, las zapatillas me esperan en el rincón,
será mejor creer que el sol
hoy, una vez más,
me va a quemar los malos pensamientos.

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