Para este tiempo, perdí toda costumbre de escribir solo tomo notas al pasar. Las palabras se volvieron trabajo Ya no sé qué tan sanadoras son. Las palabras se volvieron confusión. Años atrás, como mis citas de los miércoles, frente al escritorio, podía pensar la palabra exacta para explicar, sin sentirme desnuda. Quisiera encontrarme describiendo(me) otra vez. Afinando los sentidos frente al río. Callada, absorbiendo cada estimulo que llegue a mi cuerpo. Me atraviesa una mujer, en tan solo unos minutos. Observo, eso jamás lo perdí. la lógica no funciona, esta vez. Se disuelven las horas, como los peces de hielo en una canción de Sabina. Me tiro a la banquina a pensar el despertar de sentidos me asusta. Ya no camino igual, veo arder papeles como el Reichstag Mi cabeza arde y no es 1933. Tengo pocas palabras para contarte que siento que vuelo que estoy entera.