Ir al contenido principal

Incendio el Reichstag en el 2015

Para este tiempo,
perdí toda costumbre de escribir
solo tomo notas al pasar.

Las palabras se volvieron trabajo
Ya no sé qué tan sanadoras son.
Las palabras se volvieron confusión.

Años atrás,
como mis citas de los miércoles,
frente al escritorio,
podía pensar la palabra exacta
para explicar, sin sentirme desnuda.

Quisiera encontrarme
describiendo(me) otra vez.
Afinando los sentidos frente al río.
Callada, absorbiendo
cada estimulo que llegue a mi cuerpo.

Me atraviesa una mujer,
en tan solo unos minutos.
Observo, eso jamás lo perdí.
la lógica no funciona, esta vez.
Se disuelven las horas,
como los peces de hielo
en una canción de Sabina.

Me tiro a la banquina a pensar
el despertar de sentidos me asusta.
Ya no camino igual,
veo arder papeles como el Reichstag
Mi cabeza arde y no es 1933.
Tengo pocas palabras
para contarte
que siento
que vuelo
que estoy entera.



Comentarios

Entradas populares de este blog

desayuno en la vereda

Mario chupa la bombilla del mate amargo, q ue fue dulce cuando arrancó. El Negro les cuenta que su hijo despertó con fiebre, n o pudo dormir en toda la noche. Ayer arregló 3 bicicletas,  le quedaron 5 para la mañana de hoy. Nota que será un día difícil. Beto solo escucha, piensa si hoy ganará San Lorenzo. El negro toma un mate y va en busca de la manguera del compresor.  Terminó de abrir el local. Empezó a llover otra vez.  Moncho ya sacó la oferta de la verdulería. T ambién tiene zapatillas baratas para vender. Están arriba de los cajones de naranja.Las New Balance rojas, son una maravilla, salen ochocientos al contado. Me dan ganas de usarlas con la calza negra. Llegó Marcos y dice que el mate da asco, q ue nunca más le den a Beto tan importante misión. Les afirma que el amargo es sagrado, el azúcar te hincha. Son las y cuarto. Los chicos ya están en la escuela. Los amigos, en la esquina Desayunan juntos a las ocho de la mañana entre España y ...

parecer

Por eso me quedé acá, en short y en patas. Ni el diez por ciento de mi ropa está a la moda. Lo sé. A veces me preocupa, quisiera ser igual, venderme como copada; sonreír. o poner cara de orto para satisfacer a quien camina al lado. Ya es tarde. Quedé en la idea que es mejor caminar cómoda, El silencio es buen amigo o es cómplice. Eso de no meterme en problemas, no meterme en quilombos que no valgan. Porque cuando hay que poner el cuerpo, a nadie le importa el careteo. Hay que dejar la piel, y sin quejas de dolor. Al menos, eso entiendo por militancia. Mi bandera tiene la cara de los pequeños felices momentos: El mar, el tío, el rio, nadar, papá, mamá, la guitarra, un amigo, el patio, mis hermanas, el mate, otro amigo, la bici, mi ciudad, el pan casero, la abuela la ruta, más amigos. Correr, sentir, amar. Sigo descalza, las zapatillas me esperan en el rincón, será mejor creer que el sol hoy, una vez más, me va a quemar los malos pensa...

Así fue nuestra obra

El parque estaba verde, en su mejor momento, el agua fría, creo yo, quedé a doscientos metros de distancia el sol brilló sobre los papeles que desplegamos en el pasto. Las palabras, pensadas letra por letra.  No hubo de más, ni de menos, la simulación estaba activada. todo lo esperado nunca llegó. No era el momento; me quejo con el destino Así no tenia que ser, faltaban las risas, los chistes las canciones y el color (y el calor) Nada; eso fue. nada. Despegamos. Aunque forcemos el camino, no había marcha atrás,  nos atropelló la vida como mil veces, vos hiciste tu parte,yo no ayude a mejorar. El silencio nos mató poco a poco, pero como dice la canción, el amor es más fuerte. Resucitar siempre fue lo que mejor se nos dio. Crecimos lejos, nos hicimos lejos. Inventamos laberintos disfrazados de puentes, los pintamos, sin saber nada de arte callejero quedó genial la obra, la miro y creo que es el Muro de Berlin en la foto que l...