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Las palabras y la vida.



[Antes del Fin - Palabras preliminares - Ernesto Sábato]







Vengo acumulando muchas dudas, tristes dudas sobre el contenido de esta especie de testamento que tantas veces me han inducido a publicar; he 
decidido finalmente hacerlo. Me dicen: “Tiene el deber de terminarlo, la 
gente joven está desesperanzada, ansiosa y cree en usted; no puede defraudarlos”. Me pregunto si merezco esa confianza, tengo graves 
defectos que ellos no conocen, trato de expresarlo de la manera más 
delicada, para no herirlos a ellos, que necesitan tener fe en algunas 
personas, en medio de este caos, no sólo en este país sino en el mundo 
entero. Y la manera más delicada es decirles, como a menudo he escrito, 
que no esperen encontrar en este libro mis verdades más atroces; 
únicamente las encontrarán en mis ficciones, en esos bailes siniestros de 
enmascarados que, por eso, dicen o revelan verdades que no se animarían 
a confesar a cara descubierta. También los grandes carnavales de otros 
tiempos eran como un vómito colectivo, algo esencialmente sano, algo que 
los dejaba de nuevo aptos para soportar la vida, para sobrellevar la 
existencia, y hasta he llegado a pensar que si Dios existe, está enmascarado. 



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